Harmonía de color

Para realizar un maquillaje y saber que colores son los que debemos utilizar hay que tener en cuenta varias cosas como el color del cabello, ojos, tono de piel y estilismo.

Cuando hacemos un maquillaje podemos fijarnos en la harmonía de color o en la harmonía de formas, de éstas os hablaré otro día. Hoy hablaremos de la teoría del color para saber jugar con los colores y conseguir un maquillaje con harmonía de color. 

En los colores podemos fijarnos en su temperatura, de ahí que se llamen tonos cálidos o fríos, con ellos conseguiremos unos efectos u otros. También hay los colores neutros, estos colores podemos mezclarlos con todos, tanto cálidos como fríos y son el blanco, negro y beige. A veces el marrón también se considera neutro.

Los colores cálidos son aquellos que van desde el rojo o magenta al amarillo con todas sus mezclas. Son colores alegres, que aportan positividad, sensación de alegría, actividad, y llevados con una intensidad fuerte podemos conseguir efectos agresivos, llamativos y dinámicos. Son muy fáciles de utilizar en verano y en tonalidades suaves puedes utilizarlos todo el año dependiendo de tu estilismo.

Los colores fríos son los azules, verdes azulados, turquesas, lilas, violetas y todos los tonos en los que participa el azul. Los efectos que podemos conseguir son de serenidad, sentimentalismo, paz interior, calma, sensación de frío. Dependiendo de la intensidad se pueden utilizar más de lo que lo utilizamos en el día a día.

En realidad se pueden utilizar la mezcla de colores cálidos y fríos en maquillajes sofisticados para tarde o cocktail, sobre todo en verano ya que llevamos prendas más coloridas y permite jugar más con los colores. En este caso deberemos prestar mucha atención a la harmonía de las formas.